domingo, 21 de septiembre de 2014

UNA JUEZ CITA COMO IMPUTADOS A LA CÚPULA DE LA FUNDACIÓN AFAL Y A UNA NOTARÍA, POR QUEDARSE CON MILLONES DE EUROS DE SUS TUTELADOS.


Cada día, como ya resulta ser habitual,  aparecen en España nuevos casos de corrupción. Empezando por los que no habían probado  un plato de comida  caliente desde  que llegaron a la política,  hasta los que ya teniendo una economía más que saneada cuando accedieron a ella,  pero su desmesurado egoismo sin límites, les ha  empujado en el afán de  ir amasando millones y más millones, en una  frenética carrera para poder ser,   llegado  el día, los más ricos del cementerio.  Y  por si no fueran suficientes los miles de políticos corrumptos imputados en este país, y los que a día de hoy todavía no lo han estado, aparecen otros que, sin ser políticos,  tienen ocasión de meter mano en el cajón  que no le pertenece y, carentes de escrúpulos y sin importarles en absoluto el daño que pueden causar a los demás, tratan de lucrarse hasta que son sorprendidos y denunciados. Este es el caso concreto, como botón de muestra,  que aporto en el día de hoy, referido a  una Fundación y una Notaría, y  que para no excederme me limito a reproducir la noticia de la Agencia EFE  y que han publicado los distintos  medios de comunicación social del país.

"La Juez de Instrucción 17 de Madrid, ha citado como imputados a una notaría y a nueve personas de la cúpula de la Fundación Afal Futuro, que atiende a personas con Alzhèimer, por los delitos de apropiación indebida y de fraude procesal, que habían cometido al quedarse con millones de euros de sus tutelados.

Fuentes de la investigación han dicho a EFE que las declaraciones están previstas para los días 27 y 28 de noviembre, cuando están citados a declarar siete dirigentes de la Fundación, el marido de la expresidenta y la notaría.

La citación judicial se produce después de que la Fiscalía de Madrid presentara, en julio pasado, una denuncia en el Juzgado decano de la ciudad contra nueve personas vinculadas a la Fundación Afal por los presuntos delitos de apropiación indebida, estafa procesal y falsedad documental.

Las mismas fuentes han añadido que la actuación judicial se ha desarrollado por iniciativa de varias familias afectadas por la actuación de la Fundación, que han constituído una asociación, y prevén que durante el proceso judicial se sumen más afectados.

Los denunciantes aseguran que desde la Fundación se incapacitaba a los enfermos y se quedaban con su dinero, y señalan que en pocos años incrementó su patrimonio hasta llegar a los 12 millones de euros.

La Fundación Afal Futuro, en su página web, asegura que cuenta como único activo un centro destinado a residencia para personas mayores valorado en 12 millones de euros con un préstamo pendiente de 6 millones de euros, y subraya que no elige a sus tutelados sino que se asignan por decisión del Juzgado a propuesta de Ministerio Fiscal.

Según los denunciantes, los responsables de la Fundación emprendieron acciones para, supuestamente, sustraer bienes del patrimonio de sus tutelados e incorporarlo, bien al suyo propio a través de distintas sociedades o bien al patrimonio de la Asociación Nacional del Alzèimer Afal Contigo.

En la documentación recopilada por la Fiscalía figuran facturas de 100.000, 80.000 y 30.000 euros a cargo de los tutelados y a favor de distintas sociedades mercantiles vinculadas a los denunciados por trabajos, cuya ejecución o precio adecuado, en modo alguno, está acreditado.

Asimismo, existen distintas transferencias de importantes cantidades no justificadas (1.150.000 euros, 216.000 euros 0 100.000 euros) desde las cuentas de algunas de las personas tuteladas por la Fundación Afal a su favor o al de otras entidades vinculadas.

La Fundación Afal concertó seguros de vida o contratos de renta vitalicia a nombre de algunos tutelados, suscribiendo la póliza y situando como beneficiario a los herederos legales, a sabiendas de que éstos no existían y, en su defecto, al tutor legal, la propia Fundación Afal, según la investigación.

También se han detectado irregularidades en algunos testamentos, como la autorización de uno otrorgado por una tutelada incapacitada judicialmente, a favor de la propia entidad tutelar, Fundación Afal, lo que está prohibido expresamente en el Código Civil.

Igualmente existen "dudas razonables" de la autenticidad del testamento ológrafo suscrito por otra de las tuteladas, cuando ya estaba incapacitada judicialmente, y con un caudal hereditario de casi dos millones de euros" (1)

Esta gentuza deberá sentirse  muy orgullosa del flaco favor que han hecho   a las Fundaciones tutelares y a las Notarías de nuestro país.

(1) Agencia de Noticias EFE